La guitarra: atuendo musical

Entrevista al guitarrista y músico lagunero Rolando Gotés.

Por: Diana Leticia Nápoles

La guitarra es un instrumento que logra seducir a quienes conviven con sus melodías y su tacto. En la primaria, él comenzó a tocar este instrumento con sus cuates. A los doce años, inició sus primeras clases formales de música. Más tarde ingresó a la Escuela Nacional de Música de la UNAM, y de ahí pasó al conservatorio. Por otro lado, la preparación académica del músico lagunero Rolando Gotés, también incluyó estudios en Los Ángeles, California, y Madrid, España.

Rolando es lagunero, sin embargo, antes de que terminara la primaria, su padre consiguió un empleo en la Ciudad de México, razón por la cual tuvieron que mudarse. Y fue allá donde comenzó a estudiar esta disciplina. “Mi papá me dijo: «Bueno, pues órale, pero de veras». Primero tomaba clases particulares y después entré a la Nacional de Música”.

El artista considera que un factor fundamental fue que sus padres siempre lo apoyaron. Comenta que él veía cómo algunos de sus compañeros batallaban. “Muchas veces tocaban a escondidas, nosotros no”. Rolando recuerda que en sus cumpleaños recibía como regalo de sus padres una guitarra mejor. “Siempre nos han apoyado mucho a mí y a mis hermanos. Yo creo que eso es lo más importante, lo principal”.

Al reflexionar acerca de cómo llegó a la guitarra, el jazzista explica que, para comenzar, se trata de uno de los instrumentos más populares. También comenta que entre los músicos hay un dicho que dice: “Uno no busca al instrumento, sino que es el instrumento el que elige quién lo tocará”.

En el caso de Rolando, él recuerda que a su hermana le habían comprado una guitarra, “Yo la empecé a tocar a escondidas. Soy un poco flojo; en la casa había un piano, pero yo me clavaba más en la guitarra. Aunque también creo que influyó mucho la música que escuchaba”.

Entre sus ídolos, Rolando enlista a Eric Clapton, Jimmy Page, Jimi Hendrix y todos los grandes guitarristas de esa época. “Para mí eran los grandes dioses”.

El músico dice que por aquellos años, en México empezó a tomar revuelo el tema del folclor. “Aquí hubo algo así como un ‘boom’ de música folclórica, sobre todo por lo que estaba pasando en Chile con Salvador Allende”. Y fue esta nueva tendencia la que lo llevó a la guitarra clásica.

A pesar de que realizó estudios formales en esta disciplina, el músico considera que no llegó muy lejos con la guitarra clásica, porque cuando estudiaba en Estados Unidos comenzó a aprender jazz, y decidió cambiar de instrumento. “Yo creo que ahora un músico necesita hacer de todo, es decir, un guitarrista tiene que saber tocar varios géneros, no sólo uno, y eso implica conocer los dos instrumentos. Sí son muy distintos, no sé con qué compararlos. Sería como tocar órgano clásico y piano; es completamente distinto, pero hay que saber un poco de los dos”.

SU PASO POR SANTA CECILIA

Uno de los primeros proyectos de formación musical en La Laguna fue el Instituto de Música Santa Cecilia, que reúne a un grupo de maestros de diferentes instrumentos, para formar a jóvenes y adultos. “Fue una gran oportunidad de trabajo. Desde el inicio me di cuenta de que los muchachos no iban por una formación clásica, sino que más bien necesitaban aprender un oficio para crearse un empleo, y esta era la oportunidad de enseñarles. Entonces, empezamos a encaminar las clases por ese cauce. En la escuela podíamos tocar lo que quisiéramos, y lo encaminábamos un poco hacia la música popular; creo que eso fue lo mejor de Santa Cecilia”.

Rolando considera que darle esta orientación a la formación musical, de alguna manera seguía el ánimo de las personas que integraban el proyecto. “No era nada más la guitarra o las flautas, se hizo una ‘Big Band’ y un cuarteto de cuerdas, donde los muchachos podían tocar música de ‘Queen’ y cosas así. Estuvo padrísimo”.

En sus propias palabras, impartir clases en el instituto representaba un agasajo. “Siempre estábamos viendo qué piezas íbamos a montar, y a pesar de que la escuela está en una colonia ‘brava’, las personas nos cuidaban. A veces veía a las señoras que sacaban sus sillas para sentarse a oír los ensayos, era padrísimo estar ahí”.

En su opinión, debido a que había muchos músicos en la colonia Las Julietas -lugar donde se ubica la escuela- y casi todos eran hijos de personas que tocaban en bandas, “Los muchachos, más que admirar a Mozart, veían a su tío tocando en la televisión y decían: ‘Yo quiero ser como mi tío, yo quiero tocar esa música’. Siento que también eso tiene un valor muy importante, porque hay un vínculo de identidad con la música”.

Rolando explica que por un lado a los alumnos se les enseñaba la técnica, y por el otro aprendían una amplia variedad de géneros. Además, en Santa Cecilia hubo estudiantes que se fueron a estudiar a la Escuela Nacional de Música. “Una ventaja es que había adultos. No es fácil educar niños, hay que saber hacerlo. En Santa Cecilia siempre había mucho respeto, porque los padres de los niños también tomaban clases ahí. Si querían tocar rock, les decíamos: ‘Órale, ahí está el equipo’. Siempre podían tocar la música que les gustaba. Yo les decía «Échenle ganas, aquí sí pueden tocar esto»”.

Rolando vive desde hace algunos años en San Miguel de Allende. Al respecto, comenta que su esposa recibió una propuesta laboral en esta ciudad y decidieron trasladarse. En este lugar, Rolando ha interactuado con una nueva comunidad musical. “Allá he tenido la oportunidad de conocer más sobre el blues y el jazz, porque hay mucho ambiente americano”.

La experiencia que ha representado vivir en San Miguel, dice Rolando, le recuerda al sentido de competencia del DF. “Es un ambiente un poco cerrado. La gente del sur es más reservada. Aquí en el norte es padrísimo, uno llega y es bienvenido, al día siguiente te invitan a una carne asada. Como decía aquel escrito: «En Zacatecas se acaba la cultura y empieza la carne asada»”.

La música ha significado todo para Rolando. “Es mi oficio, me gusta mucho y trato de mejorarlo todos los días”. El jazzista considera que la música lo ha acercado a grandes amigos, a su familia. “Lo principal es el apoyo en mi casa. Mi esposa nunca me ha puesto un ‘pero’ en la música. En los momentos difíciles, ella siempre me ha apoyado, esa ha sido una bendición; mi familia, mi esposa, mis amigos. Creo que eso es lo principal”.

En lo que respecta a la música popular, Rolando cree que ésta ha ido ganando peldaños. “En mi caso no fue un problema, porque mi papá oía a Glenn Miller, él quería que yo tocara el trombón. En la casa oíamos boleros, tango, swing, entonces no había motivos para que me incitaran a irme por lo clásico, pero en muchas ciudades la educación formal es clásica, aunque esto ha ido cambiando”.

Entre los laguneros que más lo influyeron están Carlos Ramos. “Él me dio el primer empujón, trabajé con él como cinco o seis años”. También se cuentan Juan Barrios, Tomás Nájera, Raúl Jáquez, Luis García, Kiko, ‘El Paica’, Armando Martínez ‘Cuty’, entre otros.

Al referirse a Torreón, Rolando expresa que sí le gustaría regresar. “San Miguel ha sido una experiencia muy padre y he aprendido muchas cosas, pero no encajo mucho con los lugares turísticos, me parece que es un ambiente muy diferente. Hay una notable preferencia hacia los extranjeros”, finaliza.

TRAYECTORIA

Rolando Gotés estudió en la Escuela Nacional de Música de la UNAM. También realizó estudios en Los Ángeles y Madrid.

Entre sus principales influencias están Eric Clapton, Jimmy Page, Jimi Hendrix y todos los grandes guitarristas de esa época.

Actualmente Rolando Gotés reside en San Miguel de Allende, Gto., donde ha tenido oportunidad de intercambiar conocimientos con nuevos círculos musicales, además de seguir aprendiendo jazz, blues y otros géneros.

SOBRE ROLANDO GOTÉS

⇒ ¿Qué estás leyendo? Por ahora, le dedico todo el tiempo posible a estar practicando en el instrumento, pero también leo mucho de música.

⇒ ¿Pasatiempo favorito? Estar con mis amigos, convivir con las personas que aprecio, eso es lo más importante.

⇒ ¿Sitio web favorito? YouTube, para poder aprender y estar escuchando.

Twitter: @diananapoles

Texto publicado en la sección Cultura del periódico El Siglo de Torreón el 2 de diciembre de 2013.

Enlace a publicación: https://www.elsiglodetorreon.com.mx/noticia/938917.html